Areca

La Areca, también conocida como Chrysalidocarpus Lutescens, es una planta de interior muy apreciada por sus hojas verdes y brillantes en forma de abanico. Es fácil de cuidar y puede alcanzar una altura de hasta 2-3 metros en condiciones ideales. Sus hojas son largas, estrechas, y tienen una textura suave y sedosa. 

Cuidados:

• Luz: Necesita una luz brillante pero indirecta para crecer de manera saludable. Evita la exposición directa al sol, ya que esto puede quemar las hojas y dañar la planta. Asegúrate de que reciba luz filtrada, idealmente cerca de una ventana pero sin la luz directa del sol.

• Riego: Requiere un riego regular para mantenerse saludable. Mantén la tierra ligeramente húmeda, pero nunca empapada. Asegúrate de que la capa superior del sustrato se seque antes de volver a regar.

• Temperatura: Prefiere temperaturas cálidas y no tolera temperaturas por debajo de los 10 °C. Es importante mantenerla alejada de corrientes de aire frío y fuentes de calor directo, como radiadores o estufas, para evitar estrés térmico.

*Imagen ilustrativa. El producto puede presentar variaciones naturales y estacionales.*